El presidente ruso, Vladimir Putin, arribará este lunes a la India en busca de fortalecer las relaciones militares y energéticas con un aliado tradicional que también es cortejado por Washington.

India fue un aliado cercano de la extinta Unión Soviética durante la Guerra Fría y la relación ha perdurado tanto que Nueva Delhi la califica como «una alianza estratégica especial y privilegiada».

Se trata del segundo viaje internacional del mandatario ruso desde el inicio de la pandemia, luego de que en junio se reuniera con el presidente estadounidense, Joe Biden en Ginebra.

Pero Putin deberá lidiar con una compleja dinámica regional por las crecientes tensiones entre India y China, otro destacable aliado de Moscú, tras los mortales enfrentamientos en la región del Himalaya.