Este lunes la Agencia Nacional de vigilancia Sanitaria (Anvisa) de Brasil comenzó a exigir en los puestos de frontera y en aeropuertos el pasaporte de vacunación contra COVID-19 a las personas que lleguen al país, acatando una decisión de la Corte Suprema contraria al presidente Jair Bolsonaro.

En un comunicado, el organismo regulador sanitario indicó que la decisión del Supremo Tribunal Federal (STF) era de carácter «inmediato» y «sin plazo de adecuación» y por eso la máxima corte del país «exige» de la Anvisa «evaluaciones puntuales» para los casos de los viajeros que llegaron antes al país.

La Anvisa también indicó que aguarda la reglamentación interministerial en la que varias carteras, como las de Salud, Relaciones Exteriores y Defensa, entre otras, deberán definir las nuevas reglas.

La implementación del llamado pasaporte sanitario fue recomendada por instituciones como la Anvisa, la Defensoría Pública y el Tribunal de Cuentas de la Unión tras la aparición de la variante ómicron, de la que ya se confirmaron por lo menos 12 casos en Brasil.