La pandemia ha dejado 4,740,525 muertos en el mundo desde que la oficina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en China dio cuenta de la aparición del virus en diciembre de 2019, según un recuento ofrecido por la agencia francesa AFP.
Desde el comienzo de la epidemia más de 231,483,340 personas han contraído la enfermedad. La gran mayoría de los enfermos se recupera, pero una parte aún mal evaluada conserva los síntomas durante semanas o hasta meses.
Las cifras se basan en reportes comunicados diariamente por las autoridades sanitarias de cada país y excluyen las correcciones realizadas por los diferentes organismos de estadística que concluyen que la cantidad de decesos es mucho más cuantiosa.
Inclusive la OMS estima que si se tiene en cuenta la sobremortalidad vinculada al COVID-19, directa e indirecta, el resultado de las muertes podría ser 2 a 3 veces más elevado que el oficial.
El sábado se registraron globalmente 6,171 nuevas muertes y 378,753 contagios. No obstante, una parte importante de los casos menos graves o asintomáticos continúa sin detectarse, a pesar de la intensificación del testeo en diversos países.
