Como lo anunció el fin de semana, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador señaló que la prisión ubicada en las Islas Marías, Nayarit, se convertirá en un centro cultural.

López Obrador destacó que la cárcel creada en 1905 por decreto de Porfirio Díaz, dejará de funcionar debido a los diversos abusos y violaciones a los derechos humanos de los prisioneros.

Explicó que este Centro de Readaptación Social (Cereso) será convertido en un espacio destinado para las artes y la cultura, llamado Muros de Agua José Revueltas, en el que jóvenes y niños podrán realizar diversas actividades, además de conocer la historia de represión del lugar para lograr erradicar estas prácticas.

Buscarán que el territorio ocupado, también sea un espacio de conservación ecológico en al que los niños y jóvenes que acudan puedan estar en contacto con la naturaleza e incluso realizar prácticas estudiantes para su desarrollo educativo.

El jefe del ejecutivo, indicó que actualmente la cárcel cuenta con 600 internos de los cuales aproximadamente 200 serán liberados por el cumplimiento de la ley, mientras que el restante serán reubicados en cárceles cercanas, al igual que el personal que labora.

Por último, López Obrador acompañado de Josefa González Blanco Ortiz Mena, secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Miguel Torruco, secretario de Turismo (Sectur), y Francisco Garduño director de los centros penitenciarios, firmó el decreto que confirma el cierre de la prisión de las Islas Marías.