Un hecho inédito en el centro turístico El Faro de Bucerías, nunca visto en la costa sierra nahua michoacana, es el ocurrido en esta playa aquilense a la que arriban tortugas de las especies Laúd, Golfina, Negra y Carey, donde de un nido natural no protegido en el campamento tortuguero, nació un ejemplar con dos cabezas, un fenómeno de la naturaleza que de acuerdo a conocedores se presenta un caso en cien millones o más.

La cría de tortuga negra fue encontrada viva en la playa por el presidente de la Cooperativa de Pescadores de El Faro de Bucerías, Jerónimo Bautista Parra, Don Chucho, hace aproximadamente dos meses, y desde entonces la tiene resguardada en su casa a la orilla del mar, donde le cambia el agua dos veces al día y la alimenta con carne de pescado.

Conforme a lo platicado por Don Chucho, en su vida y en lo que ha preguntado a sus compañeros pescadores y vecinos de El Faro de Bucerías, nunca en la historia de esta playa y de la costa michoacana, se había encontrado viva una tortuga con dos cabezas, lo que convierte a este raro ejemplar marino en un caso único en Michoacán, y quizás en México.

Por su parte, Miguel Jerónimo, jefe de la oficina en Coahuayana de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, respaldó el dicho de Don Chucho de que es la primera vez que en la costa de Michoacán se sabe que se presenta este fenómeno inusual de la naturaleza, de una cría de tortuga viva con dos cabezas, mencionando que algunos pescadores cuentan de haber encontrado muertos uno o dos presuntos fenómenos de la naturaleza iguales, pero en grado de descomposición avanzado que no ha permitido comprobar que realmente eran bicéfalas.