Un total de ocho personas, entre ellas dos mujeres, fueron asesinados en una gasolinera localizada en la carretera Querétaro-Celaya.

Poco antes de las 17:30 horas, en una estación de servicio llegaron sujetos armados, a bordo de varias camionetas, abriendo fuego contra el grupo de personas que estaban charlando en la orilla de la carretera.

De acuerdo a testigos, los sujetos armados llegaron y al descender de las camionetas en las que se transportaban dispararon contra las víctimas.

Algunas de las personas trataron de escapar, pues sus cuerpos quedaron dispersos en el lugar. Al lugar llegaron los cuerpos de emergencia, sólo para encontrar los cuerpos de dos mujeres y seis hombres, así como los casquillos percutidos de los proyectiles de las armas de fuego usadas en el crimen.

También arribaron policías municipales, así como efectivos de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, para resguardar la zona del asesinato masivo y dar aviso a la Fiscalía General del Estado.

Tres peritos criminalistas y agentes de Investigación Criminal se encargaron de levantar las evidencias en la escena del crimen, para trasladar los cuerpos al Servicio Médico Forense.