El minorista mexicano Grupo Famsa SA se declaró en bancarrota el viernes, después de que sus acreedores aprobaran un plan para reestructurar unos USD 60 millones de bonos en mora.

El distribuidor de muebles y electrodomésticos con sede en Monterrey, con tiendas en México y EE.UU., además de un brazo financiero, dijo que utilizará el proceso del Capítulo 11 únicamente para los bonos que vencieron el 1 de junio. Tiene la intención de seguir operando y pagando otros créditos y mantenerse al día con los proveedores, dijo su director ejecutivo, Humberto Garza Valdéz, en una declaración.

“Lo anterior nos da la capacidad de seguir adelante con la refinanciación de los Bonos 2020 y continuar con nuestro negocio como de costumbre”, dijo Garza. Acreedores que poseen alrededor del 96% de los bonos aprobaron el plan de bancarrota, dijo. Todavía necesita la aprobación de la corte.

La compañía enumeró hasta USD 10,000 millones por pasivos y activos, cada uno, en documentos judiciales presentados en Nueva York.

Famsa realizó el año pasado una oferta de canje por los bonos, que algunos tenedores no aceptaron. La compañía incumplió los pagos por los USD 59 millones pendientes este mes y dijo que estaba siguiendo un plan de reestructuración.

Los bonos con vencimiento en 2024 se negocian alrededor de 43 centavos por dólar, con un rendimiento de alrededor de 36%, según datos de operaciones de Trace.

Los minoristas mexicanos se han visto afectados por un colapso en las ventas, ya que el gobierno pidió un cierre nacional a fines de marzo para contener el brote de coronavirus.

La compañía dijo que el efectivo disponible y los ingresos de las operaciones serán suficientes para financiar el negocio durante el corto tiempo que espera estar en el Capítulo 11, según el comunicado.