A las 23:13 horas del 13 de julio tuvo lugar un movimiento telúrico con una magnitud de 4.8 grados que tuvo su epicentro a 24 kilómetros noreste del municipio de Petatlán, Guerrero.
El terremoto fue perceptible en la Ciudad de México, capital del país, donde la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, anunció que aunque fue perceptible en algunas zonas la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) no encontró daño alguno por esta causa.
De acuerdo con el Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (Sasmex), el evento telúrico no ameritó alerta sísmica debido a que la baja intensidad de las ondas energéticas del sismo no permitieron pronosticar un efecto menor en la ciudad.
En total fueron 12 estaciones de la dependencia ubicadas principalmente en el estado de Guerrero.
México es un país que constantemente se enfrenta a este tipo de eventos naturales. El último que tuvo gran fuerza en el país fue el del pasado 23 de junio, donde el número de fallecidos por el terremoto que sacudió el centro y sur del país se elevó a diez mientras que su magnitud fue ajustada de 7.5 a 7.4, informó la Coordinación Nacional de Protección Civil de México.
En el sureño estado de Oaxaca se reportaron diez personas fallecidas y 21 lesionadas, además de 38 personas en dos refugios temporales; en la Ciudad de México se informó de dos heridos, señaló Protección Civil.
