La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, descartó que mañana se anuncie el regreso de la capital al semáforo rojo de riesgo máximo; sin embargo, mencionó que se considerará tomar otras restricciones.

“No vamos a pasar a semáforo rojo mañana, estamos evaluando alguna posibilidad de restricción en algunos horarios, lo estamos evaluando a partir del incremento no sólo en hospitalización, sino en ingresos hospitalarios (…) estamos haciendo este análisis en coordinación permanente con el subsecretario de salud, Hugo López-Gatell, y el Gobierno de México, en el tema de semaforización”, explicó en conferencia de prensa virtual desde su hogar.

De acuerdo con el último informe de la situación COVID-19 en la CDMX que la mandataria difunde a diario vía Twitter, hay 2,841 personas hospitalizadas: 2,116 no intubadas y 725 críticas intubadas, mientras que un día previo se registraron 21 hospitalizaciones menos.

Cabe recordar que desde el 10 de octubre ha habido una tendencia al alza, pues de acuerdo con las cifras presentadas, en esa fecha se dio registro de 2,565 internados: un aumento aproximado de 250 hospitalizaciones en poco más de dos semanas.

“Estamos tomando las medidas con toda responsabilidad, sin ninguna presión. Poniendo siempre en balance la actividad económica y los empleos, ingresos familiares, y la protección de la salud”, precisó Sheinbaum Pardo.

Al momento, suman 158,518 contagios confirmados,14,987 muertes y 12,727 casos activos por este padecimiento, de manera que la capital es la entidad más afectada en esas tres variables.

“Ayer por la noche me informaron que di positivo a la prueba de COVID. Me siento bien, fuerte y estoy con seguimiento médico de @SSaludCdMx y @incmnszmx”, comunicó a través de su cuenta de Twitter.

La mandataria capitalina había estado expuesta anteriormente al riesgo de contagiarse de coronavirus, pues había mantenido contacto con gente dentro y fuera de su gabinete que posteriormente informó haber resultado positiva a la enfermedad.

Por lo anterior, durante su habitual conferencia de prensa del pasado 19 de octubre, Sheinbaum dio a conocer que se realiza pruebas de detección de COVID-19 cada 15 días para descartar algún contagio.