El papa Francisco, que fue operado del colon hace un par de meses, indicó este miércoles que ni siquiera se le ocurrió renunciar, con lo que desmiente los rumores difundidos por medios italianos.

«A mí ni me pasó por la cabeza», aseguró el papa en una extensa entrevista difundida por la radio española Cope. «Yo no sé de dónde sacaron la semana pasada que yo iba a presentar mi renuncia», agregó.

«Siempre que un papa está enfermo corre brisa o huracán de cónclave», expresó entre risas, a la vez que aseguró que se mantiene alejado de los rumores, lee solo un diario italiano y nunca ve televisión.

Al ser consultado sobre cómo se encontraba, el papa respondió sonriente que «todavía vivo» y rindió un homenaje particular a un enfermero italiano «de mucha experiencia» que le «salvó la vida» al recomendarle que se sometiera a cirugía.

Francisco, de 84 años, fue operado el 4 de julio para extirparle una parte del colon en una intervención programada y realizada con anestesia general.

El papa argentino sufre también de una ciática crónica que le hace cojear y le causa fuertes dolores, por lo que en varias ocasiones ha tenido que renunciar a celebrar ceremonias oficiales.