La Cámara de Diputados de Chile dio un importante paso hacia la despenalización del aborto al aprobar una inédita moción que lo permite hasta las 14 semanas de gestación, proyecto que causa gran controversia en el país y que aún tiene por delante un amplio recorrido legislativo.

Con 75 votos a favor, 68 en contra y 2 abstenciones la Cámara baja ratificó una reforma al Código Penal que busca librar de sanciones a mujeres que lleven a cabo una interrupción voluntaria del embarazo hasta cumplir las 14 semanas de gestación.

En Chile, uno de los países más religiosos de la región, solo es legal abortar bajo 3 supuestos: inviabilidad fetal, violación o riesgo de la vida de madre; en caso de no cumplirse alguna de estas causales, el aborto está penado con hasta 5 años de prisión.

«La criminalización de la interrupción voluntaria del embarazo también es una forma de violencia de género (…). Avanzar en materia de derechos sexuales y reproductivos es avanzar en igualdad de género», mencionó la diputada comunista Carol Kariola, una de las autoras de la moción.

La Cámara de Diputados debe aún concretar el articulado de la iniciativa, que es la que más lejos ha llegado en la historia de Chile, para después pasar por el Senado. El proyecto haría que el aborto no fuera procesable, pero no lo garantizaría como un derecho libre y gratuito, puesto que para que un proyecto de ley pueda incurrir en gastos en Chile debe contar con apoyo del gobierno, quién rechaza frontalmente la norma.