Este jueves medios locales informaron que el líder norcoreano negó que vaya a aceptar la oferta de diálogo de Washington al considerar que no modificó su «política hostil» contra Pyonyang, aunque al mismo tiempo prometió restaurar en octubre la comunicación con Seúl para reparar lazos.

«Como demuestran claramente las acciones de los últimos ocho meses después de la instauración de la nueva administración estadounidense, su amenaza militar y política hostil contra nosotros no ha cambiado en absoluto», afirmó Kim el miércoles en una sesión parlamentaria celebrada en Pyonyang, divulgada por la agencia estatal KCNA.

Según mencionó Kim, el «diálogo sin condiciones previas» ofertado por Washington es «una fachada para engañar a la comunidad internacional y disfrazar sus hostilidades, y solo es una prolongación de la política hostil llevada a cabo por anteriores administraciones estadounidenses».

Tras la llegada al poder del presidente Joe Biden en enero, E.U.A.. insistió en retomar el diálogo «dónde y cuándo sea» para tratar de reactivar la conversación sobre la desnuclearización, estancada desde la cumbre de Hanói que fracasó en 2019.

El discurso de Kim llega dos días luego de que su régimen lanzara un nuevo misil hipersónico.