Este domingo la ministra de Educación de Costa Rica, Giselle Cruz, renunció a su cargo, en medio de una polémica por un examen aplicado el viernes a niños de primaria que incluía alrededor de 600 preguntas, algunas de ellas relacionadas con el estatus socioeconómico de las familias.

«La ministra de Educación Pública, Giselle Cruz Maduro, presentó la renuncia a su cargo a partir del lunes 15 de noviembre, la cual fue aceptada por el presidente de la República, Carlos Alvarado», informó el Gobierno en un comunicado.

Desde el viernes, educadores, sindicatos y partidos políticos de oposición criticaron las pruebas, que califican de inadecuadas para niños de 11 y 12 años de edad y que además podrían estar violentando derechos de los estudiantes, quienes tardaron más de 4 horas en terminar la prueba.

El cuestionario contenía un apartado de preguntas sobre aspectos socioecnómicos de las familias y el entorno en el que viven los niños, como por ejemplo los materiales con los que están construidas las viviendas de las familias, si tienen acceso a celulares y otros dispositivos electrónicos, electrodomésticos, etc.