Este miércoles la Organización de Estados Americanos (OEA) concluyó que el gobierno de Nicaragua no respeta sus compromisos bajo la Carta Democrática Interamericana, e instó al presidente Daniel Ortega a aceptar una misión de buenos oficios para «restablecer» el cumplimiento del documento regional de defensa de la institucionalidad.

La resolución, aprobada durante una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA, fue firmada por 25 de los 34 miembros activos del bloque regional, con el único voto contrario de Nicaragua. Ocho países se abstuvieron: Argentina, Belice, Bolivia, Honduras, México, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas y Santa Lucía.

El texto impulsado por Antigua y Barbuda, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos y Guyana, insta a Nicaragua a liberar de manera «urgente» a todos los opositores detenidos, e iniciar un proceso hacia la realización de unos comicios «libres, imparciales y transparentes, con observación internacional creíble».

La reciente Asamblea General de la OEA desconoció la legitimidad de los comicios del 7 de noviembre en aquel país, dijo que las instituciones democráticas fueron «seriamente socavadas» por el gobierno de Ortega, y encomendó al Consejo Permanente a realizar una «evaluación colectiva inmediata» de la situación.